martes, 31 de agosto de 2010

MONGOLIA 2010



MONGOLIA ES UNA TIERRA DE REBAÑOS, JINETES Y LEYENDAS
El mayor hecho relevante de la historia de Mongolia lo protagonizo Genghis Khan que en el siglo XIII con un ejército de pastores inicio el camino de la guerra y la conquista. Llegaron a ocupar China, Persia, Oriente Medio y Europa Central. Nadie pudo detenerlos, pero un buen día se volvieron sobre sus pasos regresando a sus estepas centroasiáticas y abandonaron el imperio conquistado.
En el siglo XX después de mucho luchar contra la tiranía China cayeron bajo el control de la Rusia comunista. Tuvieron que abandonar su forma de vida nómada y pastoril por la impuesta por Rusia industrial, urbana y sedentaria. En 1990 se derrumbo el sistema comunista y Mongolia consiguió su independencia de forma pacífica y sus gentes volvieron a la vida nómada y pastoril de sus antepasados.
Hoy Mongolia es un país democrático que convive con la industria el pastoreo y la vida nómada. La modernidad también está llegando a las estepas donde se ven coches, y antenas parabólicas en las gers. En la ciudad proliferan los centros comerciales, los atascos de coches y se ve a los jóvenes con sus teléfonos móviles, ordenadores y consolas de videojuegos.
EL VIAJE
El viaje organizado por la agencia Banoa, tendrá el siguiente itinerario: 
      A)    Vuelo de Madrid a Ulán Bator, capital de Mongolia, vía Moscú. 
      B) Vuelo de Ulán Bator a la ciudad de Ulaangom. 
     C) Tres días en coche todoterreno para dirigirnos a las montañas Altái, pasando por la ciudad de Olgii. 
    D) Doce días caminando por las montañas Altái para recorrer 250 kilómetros y ascender al pico Malchín de 4.050 m de altura.
     E)  Un día de coche todoterreno para ir desde el final de la caminata en Buyant Sun hasta la ciudad de Khovd.
     F)  Vuelo de Khovd a Ulán Bator.

    G)  Vuelo de regreso a Madrid vía Moscú con 13 horas de estancia en Moscú entre vuelos y visitando la ciudad.
DÍA 3: VIAJE EN AVION: Iniciamos el viaje en el aeropuerto de Madrid - Barajas. Quedamos citados a las 9 h. de la mañana. Vamos 9 viajeros (5 mujeres y 4 hombres) mas el guía, 
Salimos de Madrid a las 12 h. y llegamos a Moscú a las 16,30 h. (18,30 hora local).  Esperamos 6 horas y media para la conexión con el vuelo de Moscú a Ulán Bator; tras 5,30 h de vuelo llegamos a las 6,30 hora local al aeropuerto Genghis Khan de Ulán Bator. Hay 6 horas de diferencia horaria con España.
Las 4,30 horas de vuelo de Madrid a Moscú transcurrieron tranquilas durante el día, entre comidas y siestas. Las 6,30 horas de espera en el aeropuerto de Moscú sirvieron para irnos conociendo los componentes del grupo. Las 5,30 horas de vuelo de Moscú a Ulán Bator transcurrieron durante la noche y dormimos lo que pudimos.
En el mismo viaje nos acompaña otro grupo de Banoa, compuesto por 16 personas, que van a recorrer Mongolia en coche. 
Como siempre pasa en estos viajes, solo llegaron tres maletas, menos mal que esta vez tuve suerte y llego la mía. Las maletas llegaron al día siguiente.
Llegamos un día de lluvia, montamos en una furgoneta para ir al hotel y a mitad de camino la furgoneta se para, el conductor coge las llaves fijas, levanta el capó de la furgoneta y arregla la avería, al parecer no le entraban las marchas. La carretera entre el aeropuerto y la ciudad está asfaltada pero llena de baches y se intuye un carril en cada sentido porque no está pintada y los adelantamientos los hacen en cualquier lugar obligando al que va en dirección contraria a desviarse por donde pueda. Se ven grupos de gente esperando el autobús en medio de la nada.
Cerca de la ciudad y rodeada de montañas hay una gran central térmica, con múltiples chimeneas expulsando humo, que sirve para generar la energía eléctrica que abastece a la ciudad.
DÍA 4: ULAN BATOR: Desayunamos en el hotel y nos vamos a visitar la ciudad. Cambiamos Euros por Tugriks, la moneda mongol, un euro equivale a 1.900 tugriks. Vemos el Monasterio Choijin Lama, el Museo de Historia Natural  y nos vamos a comer, después dormimos una siesta para descansar del viaje nocturno.
La ciudad tiene un millón de habitantes y está muy extendida. En el centro está la zona moderna con edificios como el parlamento, el teatro y torres de cristal de oficinas. Se mezclan edificios nuevos con los de la época rusa.
Por la tarde visitamos el Monasterio Gandantegchenling, y cenamos en un restaurante de moda entre los extranjeros, el American-Mongolian BBQ de la calle Seúl, es un buffet libre, se elijen las carnes, pastas, verduras y salsas que quieras comer y las pasan todas juntas por la plancha redonda . En la plancha ponen una docena de raciones y los cocineros van dando vueltas alrededor de la plancha para ir dándole vueltas a las raciones.
                                                               ULAN BATOR



MONASTERIO CHIJIN LAMA


EL PARLAMENTO

GENGIS KHAN EN LA FACHADA DEL PARLAMENTO



MONASTERIO GANDAN
ESTATUA DE BUDA DE 25 METROS DE ALTURA

RESTAURANTE EN LA CALLE SEUL

DÍA 5: ULAANGOM: Mientras desayunamos llegan las maletas que faltaban y nos vamos para el aeropuerto para coger el vuelo a la ciudad de Ulaangom. Viajamos en un Foker 50 y tras tres horas de vuelo aterrizamos en una pista de tierra. Hay una hora menos que en Ulán Bator por tanto hay una diferencia horaria de 5 horas con España, esta diferencia se mantendrá durante el resto del viaje hasta que volvamos a Ulán Bator.
Por la tarde visitamos el mercado, en la zona de las carnes tienen los animales despiezados y a su lado la cabeza del animal, hay vacas, corderos, caballos; no hay limpieza y las moscas campan a sus anchas por encima de la carne. A continuación visitamos un pequeño Monasterio, resto del grande que hubo antes de la ocupación comunista.

El hotel es básico, hay un servicio con lavabo y váter para todas las habitaciones de la planta. Las duchas están en un edificio independiente y sirven para el hotel y para la gente de la ciudad que quiera ducharse. 

AEROPUERTO DE ULAANGOM







DÍA 6: VIAJE EN FURGONETA DESDE ULAANGOM HASTA EL LAGO ACHIT NUUR: Iniciamos el viaje en dos furgonetas y un jeep, nosotros vamos repartidos en las dos furgonetas con nuestros equipajes y las tiendas de campaña, en el jeep va el jefe de la expedición y la comida para 16 días.
Salimos de Ulaangom por una carretera de asfalto que a unos 20 km. se termina y pasamos a un camino de tierra para el resto del viaje.
Cuando llevábamos una hora de viaje por el camino de tierra se pincha una rueda del jeep, parada para cambiarla y sacar fotos a la estepa. Pasamos el collado Ulaan Davaa (1.971m), en el collado hay una camioneta cargada con una Ger y la familia. Seguimos viaje y se vuelve a pinchar otra rueda del jeep, parada para cambiarla, ya no hay mas ruedas de repuesto, rezaremos para que no vuelva a pinchar.





EL JUEGO DE LAS TABAS


Continuamos hasta la orilla de un rio y paramos para la comida. Mientras el cocinero prepara la comida damos un paseo por la orilla del rio y vemos una familia con sus camellos que transportan una Ger para montarla en otro lugar.
Mientras nosotros comemos los conductores se ponen a arreglar una rueda del jeep; para sacar la cámara de la rueda ponen el jeep encima de la cubierta para separarla de la llanta, un sistema original a falta de otros medios. Consiguen arreglarla y por tanto tendremos más posibilidades de llegar a nuestro destino.



Después de comer nos ponemos en marcha y pasamos al lado del lago salado Üúreg Nuur situado en la zona de La Gran Depresión, declarada por la Unesco reserva mundial de la biosfera por la gran riqueza avícola que posee (patos, gansos, grullas, pelícanos..). Iniciando la subida al collado Hamar Davaa, nuestra furgoneta empieza a fallar, le falta potencia en la subida, por fin se para y ya no arranca. Nos bajamos, cogemos nuestras mochilas y subimos caminando (4 km) hasta la cima del collado Hamar Davaa (2.338 m), mientras el conductor intenta arreglar la furgoneta. El jefe con el jeep baja en busca de la furgoneta para ayudar en la reparación.






Al cabo de un rato aparecen por fin el jeep y la furgoneta, por lo visto sufrió un atasco en el circuito del gas-oil.
Nos montamos en la furgoneta y seguimos viaje, la bajada del collado es un tremendo barrizal campo a través; pasamos por un pueblo minero (carbón de turba) y seguimos hasta cerca del lago Achit Nuur para montar las tiendas y hacer noche. Las tiendas se montan en un cerro antes de llegar al lago para evitar los mosquitos que hay en la zona del agua. Sopla bastante el viento pero así no habrá mosquitos. Hemos estado 10 horas de viaje por caminos de tierra.
Mientras montamos las tiendas, el cocinero nos prepara la cena y los conductores montan la tienda comedor con mesa y sillas plegables. Cenamos comentando las incidencias del viaje y nos vamos a descansar, el cuerpo esta magullado de tantos baches.




DÍA 7: VIAJE EN FURGONETA DESDE EL LAGO ACHIT NUUR HASTA OLGII: He dormido bien en la tienda, a pesar del fuerte viento, gracias a que me puse los tapones. La zona de acampada es espectacular se ve el lago y las montañas nevadas a donde nos dirigimos.
Mientras recogen el campamento nos vamos andando hacia el lago Achit Nuur, vemos lagartos con la piel coloreada como la tierra para camuflarse y pequeñas serpientes. Las grullas picotean en el lago.








Nos recogen las furgonetas y continuamos viaje, paramos al lado del lago en una zona ocupada por varias ger con muchos niños que juegan con aros y montan sobre terneros como si fueran caballos, cuando nos ven vienen corriendo a pedirnos caramelos. Los padres están con la matanza, las mujeres lavando las tripas y los hombres descuartizando la carne y colgándola a secar al sol. Los milanos vuelan por la zona esperando pillar algún trozo de carne.











Abandonamos el lago y nos dirigimos hacia Olgii, llegamos al rio Hovd y paramos a descansar y sacar fotos. Seguimos por una carretera de tierra que esta mejor acondicionada y que va por la orilla del rio hasta Olgii.
El hospedaje esta a las afueras de la ciudad y está compuesto por varias gers con un edificio de servicios. Me toca dormir solo en una ger; me doy una ducha con agua casi fría, será la última ducha en 15 días hasta que acabemos la caminata.
Nos vamos a visitar la ciudad, entramos en el museo que solo tiene fotos de la vida y la historia de Mongolia y animales disecados. Recorremos el mercado, los puestos están hechos con chapas de zinc, lo que venden son productos para los locales, no se ve nada para turistas. Deben de tener pocas visitas de extranjeros porque los jóvenes nos sacan fotos a nosotros  con los móviles.
Olgii tiene unos 22.000 habitantes y está muy extendida, se mezclan las casas bajas con las gers. Algunas calles están asfaltadas pero las aceras son de tierra; hay mucho polvo, se ve que hay pobreza pero no se ven mendigos ni niños pidiendo a los turistas.
Fuimos a la Mezquita y estaban celebrando una boda, los novios vestían de blanco y los invitados con trajes occidentales y todos los jóvenes con sus teléfonos móviles. Nos costó mucho encontrar un bar que nos sirviera cerveza porque esta zona es musulmana y está prohibido el alcohol.
De nuevo en el hospedaje nos preparan la cena en una ger a la luz de las velas. Al final de la cena llegan dos parejas de australianos con sus dos guías locales cargados de vodka, no paran de cantar y beber. Nosotros nos vamos a dormir pero ellos siguen con la juerga durante el resto de la noche.
A las 5 de la mañana se oyen voces de los borrachos y gritos en una ger , parece que Bolor, nuestro guía local esta tan borracho como los australianos y se equivoca de ger para ir a dormir e intenta entrar en otra ocupada por chicas. Un compañero coge a Bolor y lo lleva a su ger.




OLGII




DÍA 8: VIAJE EN FURGONETA DESDE OLGII HASTA SHIVEET HAIRHAN: A las 6 de la mañana nos levantamos y vemos que el conductor de la furgoneta gris también ha pasado la noche de borrachera con Bolor. Menos mal que el conductor de nuestra furgoneta, la verde, no ha bebido.
Tasio lucha con Bolor para sacarlo de la cama, al final lo consigue y se lo lleva como puede para que se remoje y despierte.
Cargamos las furgonetas y por fin conseguimos salir con una hora de retraso. El jefe mete a Bolor en su jeep para que vaya durmiendo. En la furgoneta verde vamos Tasio, Arrate, Martin, Ignacio y yo, nos acompaña también la chica ayudante del cocinero. En la otra furgoneta va el cocinero y el ayudante con el resto de compañeros.
El jeep del jefe sale a toda velocidad sin esperar a nadie, como hace siempre, cada uno va a su bola, no hay ninguna organización.
Después de una hora de viaje, Tasio manda parar a nuestro conductor porque no ve la furgoneta gris. Al cabo de un rato aparece y para a nuestro lado. Los compañeros le dicen a Tasio que el conductor se dormía y tuvieron que parar para que se despejara un poco.
Tasio se pasa a la furgoneta gris para controlar al conductor y se pasa el cocinero con nosotros.
Continuamos el viaje y la furgoneta gris nos pasa a toda pastilla y la perdemos de vista. Pasamos un pequeño pueblo y al cruzar un río vemos la furgoneta gris que nos saca mucha ventaja.







 

Al llegar a un cruce, nuestro conductor tiro por el camino de la izquierda, que salía de la zona del rio; el  conductor y el cocinero hablaban en mongol pero dedujimos por sus gestos que dudaban si era el camino correcto. Subimos un pequeño collado y apareció un gran valle, la pista se veía perfectamente pero no había rastro de la furgoneta gris.
El conductor cambio de dirección, salió de la pista y se metió campo a través por un barranco para salir a la pista que habíamos abandonado y que discurría al lado del rio. Tampoco había rastro de la furgoneta gris.
El cocinero nos pidió un mapa, mire en la mochila de Tasio y le deje el mapa que estaba escrito en cirílico. La chica y el cocinero estuvieron estudiando el mapa y le dijeron al conductor que había que cruzar el río y seguir por una pista que se veía enfrente y que subía por otro valle.
Cuando subimos al collado paramos y vimos en la otra parte del valle, de dónde veníamos, una estela de polvo que dejaba un coche a gran velocidad. No se distinguía el coche pero yo le dije al conductor que ese era el jefe con su jeep que volvía a buscarnos. A esa velocidad no podía ser otro.
No me hizo caso y entramos en otro valle, pararon a preguntar a un pastor y volvieron diciendo que era kazajo y que no se entendían.
Por señas les dijimos que teníamos que volver al cruce donde nos perdimos porque era la única forma de que nos encontraran los compañeros. Por fin nos entendieron y como tampoco sabían adónde iban por esa pista, dieron la vuelta y paramos en el famoso cruce.
El conductor fue a hablar con los ocupantes de una ger que había entre río y la pista y le dijeron que el jeep había pasado por allí pero que ya había dado la vuelta. No había duda, el camino bueno era el que habíamos abandonado la primera vez. Habíamos perdido dos horas dando vueltas.
Tiramos por la pista que sube al collado, se calienta la furgoneta y paramos; vemos que la furgoneta ha perdido el cristal trasero, debió golpearlo la cocina de gas que va en esa zona. Lo tapan con un cartón para que no entre el polvo.
TAPANDO EL CRISTAL ROTO DE LA FURGONETA

Continuamos el viaje y cruzamos un rio que llega el agua hasta las rodillas; para asegurarse de que vamos bien, se paran a preguntar varias veces al pasar al lado de alguna ger y por fin llegamos al campamento.
Nuestros compañeros nos dijeron que igual no los vimos cuando cambiamos de pista porque habían parado para que durmiera el conductor. Al pasar el río le metieron la cabeza en el agua para que espabilara un poco, no sirvió de mucho y lo paso el jefe a su jeep para que durmiera y como Bolor ya había dormido toda la mañana se paso a conducir la furgoneta.
Por fin estábamos todos, descargamos las furgonetas, montamos el campamento y despedimos a los conductores que se vuelven para su casa. A partir de aquí seguimos con los camellos, empezamos la caminata por las montañas Altai.
COMPROBANDO QUE LA FURGONETA PUEDE CRUZAR EL RÍO


DÍA 9: APROXIMACION A LOS GLACIARES POTANINA Y ALEXANDER: Hemos dormido a 2.500 m. de altura sobre el nivel del mar, a la orilla de un río; en el valle hay varias ger y se ven los picos nevados de las montañas Altái. Desayunamos después de desmontar las tiendas de campaña y a las 10 h iniciamos la marcha a pie, nos quedan por delante 12 días de caminata para recorrer unos 250 km.
Los camelleros y cocineros quedan cargando los camellos con los petates, las tiendas y la comida. El equipo de apoyo está compuesto por el camellero y su ayudante, el cocinero con su ayudante y el guía local (Bolor) con su ayudante, 5 camellos y 4 caballos. La carga la llevan los camellos y los caballos solo son utilizados para montar las personas.





En el camino encontramos un mongol con su águila amaestrada, nos hace una pequeña exhibición; cruzamos un río e iniciamos la subida al collado, los yak están pastando en la pradera y nos visitan el pastor y su hijo montados en sendos caballos. Nos llueve de vez en cuando suavemente.


A las 14 h hemos llegado a la cima del collado (3.050 m) y avistamos los picos más altos de la cordillera: el Ulgii (4.113 m) el Khuiten (4.374 m) y el Malchin (4.050 m) y en el valle están los impresionantes glaciares Potanina y Alexander, comemos un picnic y continuamos hasta la zona de acampada, justo al lado de los glaciares a 3.100 m de altura sobre el nivel del mar.
Hemos subido 600 metros de desnivel y recorrido 16 km. Montamos las tiendas y nos damos un paseo para ver la puesta de sol sobre las montañas nevadas. Este campamento nos servirá para dormir dos días.
Cenamos y a las 20 h nos metemos en la tienda a dormir, hace mucho frio y está cayendo aguanieve, además mañana nos toca madrugar para iniciar la subida al pico Malchin. Nos metemos vestidos en el saco porque el frio nos impide desnudarnos y además pasaremos frio de noche dentro del saco.



















EL CAMPAMENTO CERCA DE LOS GLACIARES POTANINA Y ALEXANDER
EL PICO MALCHIN (4.050 M)






DÍA 10: ASCENSION AL PICO MALCHIN (4.050 M): Nos levantamos a las 5 h desayunamos y a las 6,15 h estamos en marcha camino del Malchin; hace frio y está nevando con nieve dura. La cumbre del Malchin que estaba sin nieve en su cara sur (lado mongol), amaneció cubierta con la nieve caída durante la noche.
No ha caído mucha nieve y decidimos subir sin crampones porque el pico tiene mucha piedra suelta y será muy difícil andar con ellos. La cara norte (lado ruso) tiene mucha nieve pero en la cresta por donde vamos a subir se ve mucha piedra porque la nieve la ha quitado el viento.





Llegamos a la base e iniciamos lentamente la subida porque las piedras tienen nieve y se resbala. A los 3.800 m de altura Rosa decide bajar porque no se encuentra con fuerzas para seguir subiendo, la acompaña Bolor en la bajada y nosotros seguimos lentamente la ascensión. La marcha se ve dificultada por la altura, la nieve que sigue cayendo, el viento y la piedra suelta (parece una morrena en vez de un monte).
Sigue habiendo muchas nubes que dificultan la visión, nieva de vez en cuando y sopla un fuerte viento; por fin avistamos la cumbre y subimos el tramo final por la nieve del lado ruso porque la zona de piedra de la cresta era muy complicada. Arrate no quiere andar por la nieve y se queda sin subir a la cumbre.









Llegamos a la cumbre a las 11,15 h hemos tardado 5 horas en subir 1.000 m y andar 8,5 km. Debido a que está nublado no tenemos buenas vistas hacia el lado de Rusia ni hacia el glaciar Potonina. Hacemos las fotos de rigor en la cumbre e iniciamos la bajada, recogemos a Arrate y continuamos el descenso. Encontramos una canal de piedras finas y sueltas que nos facilita mucho la bajada, en tres horas completamos el descenso. Hemos recorrido hoy 15 km con 1.000 m de desnivel de subida y bajada.







Comemos a las 15 h y como cae una lluvia fina y fría nos metemos en la tienda a dormir la siesta, descansar y escribir o leer. Cenamos al oscurecer y nos vamos a dormir metiéndonos por segunda noche vestidos en el saco.




DÍA 11: DESCENSO AL RÍO TSAGAAN GOL: Nos levantamos y está nevando, las tiendas y los camellos están cubiertos de nieve, el paisaje es espectacular. Recogemos las tiendas con mucha dificultad, desayunamos y las 9,15 h nos ponemos en marcha.






A las 14 h tras 16 km recorridos llegamos al río, lo cruzamos montados en los caballos y el agua les llega a la barriga. Sigue nevando toda la tarde y se ve toda la estepa blanca. Vamos comentando la noche que nos espera, tenemos las tiendas húmedas, no para de nevar y hace un frio que pela.















Llegamos a un corral de ovejas en medio de la estepa donde nos esperan los camelleros para decidir qué hacer. Hay dos opciones seguir hasta el lugar previsto y montar las tiendas encima de la nieve o montarlas en el corral de las ovejas que tiene techo aunque el piso esta todo lleno de estiércol y huele muy mal. Decidimos montar las tiendas en el corral porque dormiremos más calientes, y además no tiene pinta de parar de nevar.
Montamos las tiendas bajo techo y encima del estiércol del piso que esta duro por el frio, huele muy mal pero nos vamos acostumbrando. Surge un pequeño problema, Arrate tiene fobia a las ovejas y se pone histérica, dice que allí no duerme. Tenemos que tapar todas las entradas para que vea que las ovejas no pueden entrar, no es suficiente, sigue nerviosa y llorando. Se toma unos calmantes y se va serenando. En la cena ya estaba más tranquila. Nos vamos a dormir y nos metemos en el saco vestidos  por tercera noche consecutiva.
Hemos recorrido hoy 24 km (llevamos 55 km acumulados) con un desnivel de 350 m de subida y 750 m de bajada; acampamos a 2.600 m. s. n. m.




EL HOTEL "APRISCO DE OVEJAS"

DÍA 12: APROXIMACION AL COLLADO TSHAGAN JERGÁN: Nos levantamos de nuestro hotel de 5 estrellas y desayunamos en el restaurante montado encima del estiércol. Hemos pasado la noche sin frio aunque el olor que tenemos tardaremos días en perderlo.
Ya no nieva pero el cielo está muy cubierto de nubes y hace mucho frio. Los camelleros comentan que hoy no podremos pasar el collado porque los camellos no lo pueden cruzar con nieve. Nos ponemos en marcha y cuando lleguemos al collado se decidirá lo que se hace en función de la situación. Tras recorrer 8 km por encima de la nieve, llegamos al valle que llega a la base de las montañas que tenemos que cruzar. La subida al collado se ve completamente tapada por la nieve y además es de piedra suelta y tiene mucha pendiente, esto dificulta el paso de los camellos que tienen la planta de las patas planas y resbalan en la nieve; estamos a 2.500 m. s. n. m. y el collado tiene 3.200 m.








Como no podemos pasar, Bolor se acerca a una ger y charla con la familia que allí vive, aceptan que acampemos al lado de la ger. Montamos las tiendas y nos queda todo el día libre pues son las 11 h.
La familia de la ger es de la etnia Tuban y nos invitan a pasar a la ger. Tienen encendida una cocina de hierro colocada en el centro de la ger y usan como combustible el excremento seco de las vacas y los yaks, hace un calorcito que agradecemos, porque llevamos varios días calentándonos solamente con el calor de nuestro propio cuerpo.
Nos sentamos alrededor de una mesa redonda y nos ponen quesos de distintos tipos, galletas y nos dan un té con leche para beber, son muy hospitalarios. En la ger están las mujeres y los niños, la familia la componen: la abuela, dos hijas y seis nietos (tres chicas y tres chicos), los maridos de las hijas  están por el campo.








Pasamos el día con los Tubanes, jugamos con los niños y charlamos al calorcito de la ger. Les gustan mucho las fotos, no paramos de fotografiarlos y enseñarles en las pantallas de la cámara como han salido, se ríen y no paran de posar. La abuela nos saca el álbum de fotos de la familia, son muy antiguas y la mayoría en blanco y negro.
La ger es una casa original, es redonda de 6 m. de diámetro con el techo cónico que tiene una abertura en la parte central por donde sale la chimenea de la cocina y entra la luz. Es desmontable y ligera para poderla transportar con facilidad porque se tienen que desplazar por la estepa con sus ganados en función de los pastos y las estaciones. Cada familia suele tener dos ger una para la familia y otra como almacén.
La estructura de la ger es de madera, se compone de dos marcos rígidos, uno rectangular que sirve de puerta y otro redondo que va en el centro del techo para sujetar la estructura del techo y como ventana; este marco redondo se sustenta desde el suelo con dos pilares de madera. La pared es una celosía de madera plegable, la unión de los listones es con un eje de cuero para que se pueda plegar.
Para montarla colocan la puerta rígida y montan la celosía de la pared, en círculo, desde un marco de la puerta hasta el otro, lo atan por el exterior con cuerdas a distinta altura y las tensan desde los marcos de las puertas.
El techo cónico lo forman listones que ponen desde la celosía hasta el marco redondo central, van atados con cuerdas de cuero. Toda la estructura va cubierta por una capa gruesa de fieltro de lana prensada que sirve de aislamiento y encima lleva una tela impermeable al exterior. Por el interior la decoran con tapices. En el piso colocan un hule de plástico para aislar la humedad y encima colocan las alfombras de lana. Tanto los tapices como las alfombras y la capa de fieltro de aislamiento son fabricados por ellos mismos utilizando las materias que les proporcionan los animales: lana, pelo y piel.
La orientación de la ger es con la puerta hacia el este y la distribución de los muebles es en circulo al lado de la pared, según se entra a la izquierda empiezan las literas de camas que sirven de sofás, en el centro entre la pared y la cocina esta la mesa redonda con pequeñas banquetas, luego más camas, por último un mueble despensa y los muebles de cocina con las vajillas y los útiles de cocinar; queda un espacio libre a la derecha de la puerta para los trabajos diversos. La cocina esta en el centro de la estancia y la chimenea sale por el hueco central del techo. Este hueco central sirve también de ventana, tiene una tela que se manipula con una cuerda desde el exterior para abrir o cerrar. 
Nuestros cocineros preparan para todos la comida en la cocina y comemos en la mesa de la ger al calorcito de la cocina. Por la tarde se ha despejado y hace un sol espléndido, la nieve se va derritiendo rápidamente; a ver si mañana podemos cruzar el collado pues no podemos perder más días porque tendríamos que recuperar el tiempo perdido en etapas más largas.
Por la tarde paseamos por el valle, cenamos en la ger y antes de dormir como la noche está despejada contemplamos las estrellas, parecen más grandes que en España; pasamos un rato contemplándolas a pesar del frío.
Nos vamos a dormir y nos metemos vestidos en el saco por cuarto día consecutivo; la ropa ya forma parte de nuestro cuerpo, menos mal que el olor no se nota, todos olemos igual y además estamos entre animales que disimulan nuestro olor.









DÍA 13: COLLADO TSHAGAN JERGÁN Y RÍO TSHAGAN US GOL: Esta noche he pasado algo de frio, ha caído una helada fuerte y la tela de la tienda tiene encima una capa congelada.
Recogemos las tiendas desayunamos en la ger y a las 8 h iniciamos la marcha con un frío que pela. Como hace un sol radiante la temperatura va subiendo y además nos calienta el esfuerzo de subir al collado. A las 10,45 llegamos a la cima, tiene 3.200 m. s. n. m. y hemos recorrido 6 km.











Sacamos fotos e iniciamos la bajada hacia el río, a las 13 h y habiendo recorrido 13 km llegamos a un arroyo, nos sentamos en la orilla a comer nuestro picnic vegetal, menos mal que Tasio todavía tiene jamón y nos sirve para llenar un poco más el estómago.





Como hace un día estupendo y solo nos quedan unos 9 km para llegar, dormimos una pequeña siesta. Cruzamos el arroyo y continuamos hacia el río Tshagan, llegamos a las 16,15 h a la zona de acampada que está a 2.200 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 22 km (llevamos 85 km acumulados) con un desnivel de 700 m de subida y 1.000 m de bajada.
Montamos las tiendas y por fin nos toca lavarnos, aquí la temperatura es más suave, pero el agua está muy fría. Al lado del campamento pasa un arroyo de agua limpia, me desnudo y me meto en el arroyo para lavarme todo el cuerpo. El agua está congelada pero da igual, después de 5 días sin lavarme ni cambiarme de ropa, necesito un baño. Una vez seco y vestido con ropa limpia me siento otra persona, hasta huelo a limpio.







Cenamos y después de pasar un rato charlando, salimos a ver las estrellas porque el cielo está completamente despejado. Se ven perfectamente las constelaciones, las dos Osas, Boyero, la Corona Boreal, Hércules, la Vía Láctea. Todas las estrellas se ven aquí más grandes que en España.
Nos acostamos bien abrigados porque se prevé que va a helar.


DÍA 14: RÍO TSHAGAN US GOL: Nos levantamos con una buena helada, la tienda tiene una capa de escarcha y la ropa que dejaron colgada para secar esta rígida como una tabla.
Levantamos las tiendas, desayunamos y a las 8 h iniciamos el recorrido descendiendo por la orilla del río con unas vistas fantásticas. El río tiene bastante caudal y el agua esta blanca por los arrastres de arenas y piedras de las montañas; este río nace en los glaciares y baja haciendo meandros de un lado al otro del ancho valle. 
Por fin empezamos a ver arboles, hay pequeños bosques de coníferas; hasta aquí todo el viaje había sido por estepas o montañas y no habíamos visto ni un solo árbol. Vemos algunas familias de kazajos asentados a la orilla del río con sus rebaños pastando por el valle.
Comemos a las 14 h después de haber recorrido 17 km y nos tumbamos a dormir la siesta a la sombra de los arboles. Continuamos nuestra ruta y cruzamos el río por un puente de madera medio derrumbado. 




















Llegamos a una ger habitada por una familia de kazajos y nos invitan a tomar té con leche y comer de sus quesos. En el exterior de la ger tienen secando los quesos y la carne, colocados encima de una plataforma elevada sobre el suelo. La mujer tiene dos niños y esta extendiendo lana en el suelo para secar, Al lado de la ger hay un camión ruso con pinta de abandonado, según nos dice Bolor no pueden utilizar los camiones porque el gas-oíl es muy caro.
Esta familia nos vende 4 litros de cerveza, nos las beberemos para cenar, será una fiesta porque hace 10 días que no probamos una cerveza. 




Llegamos a la zona de acampada a las 17, 20 h. a una altura de 2.100 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 24 km (llevamos 109 km acumulados) con un desnivel de 300 m de subida y 400 m de bajada.
Bolor nos recoge los pasaportes, se monta en un caballo y se va a llevarlos a un puesto militar para el correspondiente control, estamos cerca de la frontera con Rusia.
Nos visita una familia de una ger cercana, el padre a caballo con su hijo y la mujer a caballo con otro hijo, recogen a su rebaño de yaks para pasar la noche, quieren que les saquemos fotos. Nos lavamos en el río, la temperatura es más suave y el agua no está demasiado fría.










DÍA 15: LAGO HOTON NUUR: Como todos los días desayunamos después de recoger las tiendas y nos ponemos en marcha a las 8,15 h. Esta es una etapa llana vamos por pista rodeando todo el día el lago. El día esta soleado y la temperatura es buena.
Pasamos al lado del campamento militar, no lejos de allí se ve una pequeña concentración de gers. En esta zona hay puentes de madera para cruzar los ríos, la pista por la que vamos es la que da servicio al campo militar por eso hay puentes. Pasamos al lado de algunas gers y en una nos invitan al te y los quesos. Sacamos fotos a los niños que tienen la cara curtida por el aire y el sol. Cruzamos pequeños bosques de coníferas y se ven zonas que han sido cortados los arboles. Seguimos viendo las montañas nevadas de la frontera con Rusia.



















Como vamos por una extensa llanura, vemos a lo lejos que unos niños salen corriendo de la ger para ir a esperarnos a la orilla del camino, cuando llegamos vemos que han colocado en el suelo alfombras, tapetes y bolsos de lana para que les compremos; algo vendieron.
Llegamos a las 18 h. al final del lago y acampamos en la orilla a una altura de 2.050 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 28 km (llevamos 137 km acumulados) con un desnivel de 100 m de subida y 150 m de bajada. Nos toca nuevo baño y lavado de ropa.






DÍA 16: LAGO HURGAN NUUR: Iniciamos la marcha a las 8,20 h. el cielo está parcialmente cubierto; dejamos la orilla del lago y nos adentramos por una inmensa llanura donde se ven rebaños de ovejas. Cruzamos un rio descalzos con el agua hasta la rodilla. Al salir del río se oyen los primeros truenos de una tormenta y se pone a llover, nos apresuramos para llegar a una ger cercana y nos invitan a cobijarnos hasta que pase la lluvia. Nos invitan a te con leche, quesos, mantequilla, nata de leche y buñuelos. Pasamos un rato charlando y sacando fotos a la familia. Sacan los artículos que fabrican con lana y les compro un tapete redondo, no sé qué hare con él pero hay que agradecerles la hospitalidad.











Para de llover y reanudamos la marcha. Al rato empieza de nuevo a llover y nos acercamos a una casa de madera, es la primera que no es una ger, entra Bolor a parlamentar y aceptan que nos recojamos dentro, nos sentamos en el salón y aprovechamos a comer. Tiene una tele en blanco y negro y están echando una película china. Terminamos de comer y como ya no llueve, les damos chocolate y caramelos y nos vamos. Los camellos también han llegado y se van con nosotros.










Llegamos a otro río que cruzamos en los caballos. Vuelve a empezar a llover y corremos para refugiarnos en unas casas de madera que están vacías, parece un campo militar de entrenamiento. Cuando para de llover reiniciamos la marcha, menudo día llevamos de lluvia. Justo cuando llegamos a la zona de acampada, a las 16 h, empieza otra vez a llover, los camelleros ya han montado la tienda comedor y nos refugiamos en ella hasta que pare.
Como están pasando continuamente nubes descargando agua, esperamos a que haya un hueco que no caiga agua y montamos rápidamente las tiendas. Sigue lloviendo a ratos suavemente. Desde la tienda sacamos fotos al arcoíris con el lago y los camellos de fondo.
Hemos acampado al lado del lago a una cota de 2030 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 22 km (llevamos 159 km acumulados) con un desnivel de 200 m de subida y 200 m de bajada. No ha parado de llover en toda la noche y a ratos ha granizado.





DÍA 17: LAGO HURGAN NUUR – RÍO JOVD GOOL: Nos levantamos con un sol espléndido, las nubes descargaron toda el agua durante la noche. Desayunamos, recogemos las tiendas y nos ponemos en marcha a las 8,20 h.  Iniciamos la caminata por la orilla del lago, luego dejamos el lago y seguimos por una zona de montículos pequeños y de muchas piedras. Todo el camino es una meseta irregular con continuas subidas y bajadas, la jornada es un poco monótona lo único que nos alegra la vista son las montañas nevadas que nos rodean. Comimos, dormimos la siesta y a las 15,30 llegamos al río Jovod. Todo el día ha estado despejado con una temperatura agradable. 
Cruzamos el río en los caballos y acampamos en su orilla, hay varias gers asentadas en la zona. Montamos las tiendas y como nos queda bastante tiempo hasta la cena, nos lavamos en el río, lavamos la ropa y visitamos a las familias de las gers que estaban fabricando fieltro prensando la lana. 
Hemos acampado al lado del río a una cota de 2080 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 24 km (llevamos 183 km acumulados) con un desnivel de 250 m de subida y 200 m de bajada.


















DÍA 18: LAGO HAR NOOR – VALLE JARGANT: Desmontamos el campamento e iniciamos la subida hacia el collado, llegamos al lago Negro, HAR NOOR, situado a 2.500 m. s. n. m. y en la base de una montaña completamente nevada HAIRHAN UUL de 3.943 m. Seguimos viendo a lo lejos las montañas nevadas de la frontera con Rusia. En esta zona nos dividimos en dos grupos, uno que sube con Tasio al cerro que hay al final del lago y otro grupo que no tiene ganas de subir y se va con Bolor por la orilla del lago.
Nosotros con Tasio a la cabeza continuamos cresteando y ascendemos hasta un cerro de 2.780 m. desde donde se ve el valle JARGANT a donde nos dirigimos. Iniciamos la bajada del cerro y vamos a buscar al resto del grupo para comer, pero vemos que ellos se quedaron comiendo a la orilla del lago. Cuando estamos terminando de comer llega el otro grupo y continuamos descendiendo hacia el valle. En este valle se ven unas 30 gers distribuidas por todo el valle; es la mayor concentración de gers que hemos visto hasta ahora.















Pasamos al lado de un grupos de 6 gers y salen corriendo a buscarnos para enseñarnos dos lobeznos que tienen en una jaula, a cambio quieren que les demos alguna propina. 
Yo pensaba que el lobo se habría extinguido hace mucho tiempo en Mongolia, dado que se han dedicado durante siglos al pastoreo, pero al tener estos en cautividad quiere decir que siguen corriendo libres por la estepa a la caza del ganado.





Hemos llegado al fondo del valle e iniciamos una suave subida hacia otras dos gers que se ven en un valle lateral. Acampamos al lado de las gers a 2.550 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 26 km (llevamos 209 km acumulados) con un desnivel de 900 m de subida y 430 m de bajada.






DÍA 19: COLLADO ALPANG – VALLE TSHAGAN CHOLÓ: Toda la noche estuvo lloviendo, al salir de las tiendas vemos que los montes de alrededor están nevados. Desmontamos el campamento y a las 8,40 h iniciamos la subida hacia el collado ALPANG (3.025 m.) a 2.800 m de altura empezamos a pisar nieve; pasado el collado iniciamos la bajada y desaparece la nieve, el día está despejado pero a esa altura hace un poco de frío.









Todo el día estuvimos rodeando el pico HAIRHAN UUL de 3.943 m. que habíamos visto el día anterior desde el lago Negro. Comemos y continuamos bajando hacia el valle, llegamos a una ger y salen corriendo 5 niños a nuestro encuentro, luego llega la madre con otro niño en el cuello, sacamos fotos y Mercedes coge al pequeño para hacerse una foto, estaba con el culo al aire la meo y lo soltó corriendo.









Continuamos hacia el fondo del valle y llegamos a otra ger y nos invitan a tomar el te con leche y comer queso. Martin no quiso entrar en la ger y dijo que se iba a dar una vuelta por los alrededores. Cuando llegaron los camellos nos pusimos en marcha y Martin no aparecía ni lo veíamos por ninguna parte. 
El grupo sigue la marcha y yo me quedo en un cerro con la mochila de Tasio mientras él va por la zona que vimos marchar a Martin a ver si lo localiza, al cabo de un rato lo vemos en lo alto de una montaña y le hacemos señas para que baje hacia el collado que tenemos que pasar. Por fin nos reunimos y nos dijo que no se había dado cuenta de que se había ido tan lejos. Pasamos el collado (2.900 m.) e iniciamos la bajada hacia otro valle en un circo glaciar donde estaban montando el campamento al lado de un pequeño lago y en la base del glaciar. 
Acampamos  a 2.700 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 23 km (llevamos 232 km acumulados) con un desnivel de 950 m de subida y 650 m de bajada.




EDELWEISS

DÍA 20: VALLE KOULCHET: A las 8,40 h iniciamos la marcha dejando atrás el lago y el glaciar, es el último día a pie. Seguimos bajando el valle y vemos un par de gers con sus rebaños de ovejas y yaks cuidados por una niña. Los excrementos de yak los recogen por toda la pradera y hacen montones para luego llevarlos a la ger para quemar.




EXCREMENTOS DE YAKS

Todo el camino lo realizamos por pista con muchas piedras, resto de los arrastres del río desde el glaciar. Comemos y dormimos la siesta. Continuamos valle abajo y a las 15,30 llegamos a la zona de reunión con las furgonetas, pero no han llegado.
Montamos las tiendas y Bolor se va a caballo hasta el pueblo a ver si localiza a las furgonetas. Nos bañamos en el río, hace sol y la tarde esta magnífica. A las 20 h mientras cenamos llegan las furgonetas y nos traen cervezas; aunque están calientes nos saben a gloria pues llevamos 12 días a base de agua.
Acampamos  a 2.200 m. s. n. m. Hemos recorrido hoy 22 km con un desnivel de 200 m de subida y 700 m de bajada. El recorrido total de los 12 días es de 254 km.








DÍA 21: VIAJE EN COCHE DESDE BUYANT SUM HASTA KHOVD: Nos levantamos, desayunamos y desmontamos por última vez las tiendas. Cargamos todo en las tres furgonetas y nos despedimos de los cocineros y de los camelleros, les damos la correspondiente propina por los servicios prestados durante todos los días de caminata. También nos despedimos de los camellos y de los caballos que tanto servicio nos han dado llevando los petates, las tiendas, la comida y cruzándonos en los ríos. 
A las 8 h nos vamos en las furgonetas, llegamos a Buyant Sum y una furgoneta se queda a llenar el depósito de gas-oíl, las otras dos seguimos la marcha. Perdemos de vista a una furgoneta en uno de los múltiples cruces de pistas; paramos en un cerro y llega la furgoneta que paro a echar gasolina, la otra se ha perdido, esperamos 20 minutos y aparece la tercera furgoneta.
Seguimos las tres furgonetas juntas y al llegar a una llanura la pista pasa por un barrizal, una de las furgonetas se atasca y hay que remolcarla con otra. La que iba a remolcar no arranca, menos mal que tiene manivela y se soluciona el problema. Mientras esperamos a que saquen la furgoneta del barro nos comen los mosquitos, los había por millones y estaban hambrientos.





Seguimos por una pista de tierra con muchísimo polvo y pasamos al lado del lago TOLBO NUUR  es el último gran lago que veremos. Al lado de la pista hay un mongol con su águila amaestrada y paramos para verla y sacar fotos, Albert la coge para sacarse una foto con ella en la mano.





Paramos a comer al lado de un pequeño lago, continuamos la marcha y llegamos a un bar de carretera a tomar un refresco. Hay un grupo de bomberos ingleses que están dando la vuelta al mundo con su camión. Continuamos la marcha y al cabo de un rato paramos en un collado a estirar las piernas, cuando vamos a montar encontramos una de las ruedas de nuestra furgoneta pinchada; cambian la rueda y continuamos el camino. Por fin avistamos la ciudad de KHOVD pero nuestra furgoneta se queda sin gas-oil, nos pasan gas-oil de otra furgoneta y continuamos, rodeamos la ciudad y vamos a un asentamiento de gers en medio del campo, es nuestro hotel.
Hemos recorrido 200 km de pista de tierra en 10 horas. Colocamos nuestros petates en la ger y por fin después de 14 días nos podemos dar una ducha; el agua esta fría y sale muy poca pero nos parece un lujo.
Cenamos en una mesa con mantel  y nos vamos a la ciudad, que está a 6 km, a tomar una cerveza. Son la 9 de la noche y no se ve a nadie por la calle, en el restaurante-pub solo hay media docena de clientes, debe ser el único que hay en KHOVD con una población de 37.000 habitantes.
Nos vamos para la ger a dormir en una cama, con su somier, su colchón, que maravilla. Atrás quedan 14 días durmiendo en el suelo.







DÍA 22: VIAJE EN AVION A ULAN BATOR: Nos levantamos, desayunamos y a las 8 estamos en el aeropuerto. Hay muchísimos mosquitos, como vamos cargados con los petates y las mochilas no nos quedan manos para espantarlos y se ceban con nosotros.
Facturamos el equipaje y nos despedimos de Bolor y Kugan que se quedan en Khovd. Tras tres horas y media de vuelo aterrizamos en el aeropuerto Chinggis Khaan de Ulan Bator. Vamos para el hotel a dejar las maletas, comemos y dedicamos la tarde a las compras.
Nos vamos a cenar a un buen restaurante a comer un filetón de carne, que placer, ya estaba arto de tanta pasta y verdura. Tomamos una copa en el Iris Pub y a dormir en una cómoda cama.




DÍA 23: ULAN BATOR: Me afeito las barbas de 20 días, se atasca la maquinilla, sin barba me veo más joven. 
Vamos a comprar mapas y luego negociamos una furgoneta para que nos lleve a todos al mirador de la ciudad y al Palacio de Invierno.



Comemos una hamburguesa para no perder tiempo y por la tarde continuamos las compras. Yo me voy a correos a comprar sellos, postales, un libro de fotografías y un  disco de melodías de Mongolia. Luego voy con Mercedes y Tasio a oír música típica mongolí en el Monasterio Choijin Lama.
Volvemos al hotel a reunirnos con el resto del grupo para ir a cenar al restaurante italiano Marco Polo. Cenamos ensalada y pizza para gastar los tugriks que nos quedan. Nos acostamos pronto porque mañana hay que madrugar.







DÍA 24: DE ULAN BATOR A MOSCU: Nos levantamos a las 4 de la mañana. Metemos el equipaje en la furgoneta y nos vamos para el aeropuerto. Facturamos las maletas y tomamos un café para terminar la moneda local.
A las 8,15 h iniciamos el vuelo y tras 6,30 horas de vuelo llegamos a Moscú, aquí son las 10,45 hora local. Como el vuelo para Madrid sale a las 19,20 h nos vamos a visitar la ciudad. Tenemos visado para poder entrar en Rusia.
Viajamos hasta la capital en tren, cogemos el metro y nos vamos a la Plaza Roja. Damos un paseo por la plaza, rodeamos el Kremlin pasando por la orilla del rio Moscova y los jardines de Alejandro; se pone a llover y nos metemos en el moderno y gran centro comercial GUM con una fachada de 242 m que da a la Plaza Roja. Para comer buscamos un restaurante más típico ruso, porque dominan los extranjeros.
La plaza Roja es espectacular, uno está acostumbrado a verla en la pantalla y al pisarla y formar parte de ella te da otra visión diferente. Está rodeada por edificios como el Kremlin, la catedral de San Basilio, el Museo Histórico y el centro comercial GUM.






















Como el tiempo no da para más, cogemos el tren y regresamos al aeropuerto. 
Vuelo de regreso a Madrid y fin del viaje.