domingo, 18 de diciembre de 2005

MARRUECOS. MEDIO ATLAS 2005



Atlas Medio: Esta cordillera forma parte de todo el macizo del Atlas y se caracteriza por albergar en su interior extensos bosques de cedros, árboles de gran porte, reliquia de épocas frías y donde brinca, salvaje, el mono de berbería. La cordillera presenta además curiosas montañas volcánicas y cráteres que guardan lagos en su interior. Realizaremos recorridos a pie por estos bosques y montañas, y, a su vez, tendremos tiempo para conocer las ciudades Meknes, Fez, Tetuán y la villa atlántica de Asilah.

                                      CEUTA






LARACHE

SIDI-KACEM


ASILAH
Asilah tiene la facultad de combinar varias propiedades en una sola ciudad: su medina es una de las más cuidadas y luminosas del país, lo que sumado a la anchura de sus calles la convierten en una opción ideal para todo el que quiera darse un agradable paseo, alejándose del continuo fluir de personas que se produce en la mayoría de las otras medinas.
Por otro lado, la muralla que la escuda y que da al mar, escoltada por numerosos bastiones y que sirve de presentación de la Playa de los Cañones, resulta un lugar ideal para pasear o, como hacen muchos de sus ciudadanos, simplemente mirar al mar mientras que se mantiene una conversación.
No podemos olvidar su carácter bohemio, que ha terminado por convertirla en lugar de inspiración y evasión de numerosos artistas. Esto queda patente desde la primera toma de contacto en la diversidad de pinturas murales que decoran la medina y en el número de galerías de arte existentes.
Por todo ello Asilah es el cobijo ideal de todo aquel que quiera desconectar y escaparse al país vecino pero que a la misma vez quiera algo distinto: un lugar en la que a la magia del estilo de vida marroquí se le une una gran carga artística y una envidiable situación geográfica y climática.







MEKNES
Meknes es la ciudad imperial menos conocida de Marruecos. Comparte el título de “ciudad imperial” junto con Marrakech, Fez y Rabat pero es la que, sin duda, recibe menos turistas al año. Gracias al poco turismo, en Meknes se respira un ambiente mucho más amable y distendido que en el resto de ciudades de Marruecos
















AZROU



BOSQUE DE CEDROS
El cedro es aquí una auténtica reliquia conservada desde la última glaciación. Se trata de enormes extensiones de bosque que guardan junto a ejemplares jóvenes a otros cedros centenarios y de porte gigante. Junto con los cedros podremos encontrar otras especies mediterráneas como la encina y el quejigo. Y como curiosidad estos bosques están habitados por un mamífero exótico que tendremos la oportunidad de conocer como es el “Macaco de Berbería”, uno mono que juguetea por entre las ramas de los árboles, pariente del “mono de Gibraltar”. 



MACACO DE BERBERÍA













DJEBEL AYANE







DJEBEL AYANE (2.455 M)











FEZ
Fez, es famosa por su antigua ciudad amurallada, que muchos comparan con la de Jerusalén. Es la primera de las ciudades imperiales de Marruecos, ya que se remonta al siglo VIII. Es también pionera en el culto musulmán de este país y posee una de las universidades más antiguas del mundo. Todas estas primicias hacen de Fez, como también se la conoce, una ciudad particularmente atractiva, con una cultura viva e influyente. De hecho, es particularmente conocida por ser la capital cultural y espiritual de Marruecos, centro del arte y la ciencia.
Ciudad Morisca del siglo IX que es una gran medina compuesta por más de 9.000 callejuelas y tiene el lujo de ser la mejor conservada del mundo árabe y, por qué no, el mayor monumento vivo de todo Marruecos. La extensa y laberíntica medina de Fes el-Bali, dicho sea de paso, también destaca por ser la zona urbana más grande del mundo sin tráfico de coches. El transporte de mercancías se realiza en burros, carruajes y motos. Son callejuelas donde parece haberse perdido el tiempo...
































FINAL DEL VIAJE